La mayoría de estudiantes se dan cuenta que durante las horas de estudio sufren un bloqueo mental y aunque intentan compensarlo con un mayor esfuerzo y un número más alto de horas de estudio su rendimiento no mejora. Desde Universitarios en Apuros te explicamos cómo salir de este bloqueo mental tan fastidioso.

¿Dedicas muchas horas de estudio pero no consigues avanzar en las lecciones? ¿Te cuesta concentrarte? ¿Tu rendimiento estudiando no es el esperado?

Si la respuesta a alguna de estas preguntas es un sí rotundo, continúa leyendo.

El bloqueo mental,  es un factor desencadenante del estrés y/o la frustración, provocando que las personas que sufren esta casuística tengan constantemente una sensación de inseguridad y tengan dudas sobre sus capacidades.

Para evitar que sufras el bloqueo mental, en este post de Universitarios en Apuros compartimos contigo algunas pautas muy útiles.

DESLOCALIZACIÓN

Cambia el entorno de estudio. Si tu lugar de estudio es una habitación de tu casa vete a la biblioteca y viceversa. Aunque no seas consciente, es muy probable que este factor tan banal esté influyendo de forma negativa en ti. Con este cambio tan sutil tu mente dejará de estar condicionada, conseguirás salir del bloqueo mental y con el tiempo podrás volver a tu lugar de estudio inicial.

NO MIDAS TUS AVANCES

Fijar metas de estudio diarias con un límite temporal es una técnica de estudio muy recurrente, pero no siempre es la adecuada según el tipo de persona. En este caso debemos evitarla.

Mide la relación tiempo dedicado al estudio con los contenidos que hayas afianzado de forma correcta. De esta forma, conseguimos eliminar la presión que nos auto imponemos y podemos estar orgullosos de que el tiempo utilizado ha sido invertido con resultados.

Poco a poco te darás cuenta que vas aumentando el ritmo de estudio consiguiendo mayores resultados y el bloqueo mental irá a menos.

OBJETIVOS REALISTAS

En el punto anterior explicamos que no siempre es recomendable fijarse metas como ‘estudiar 3 tema diarios’ ya que no son realistas y que esto puede ser uno de los factores por los que sufras un bloqueo mental a la hora de estudiar.

En este caso, una meta adecuada sería fijarnos por ejemplo 3 horas de estudio con sus correspondientes descansos o  bien hacer una lista de ‘tareas’ concretas con un tiempo determinado para cada una de ellas. Aunque no terminemos de estudiarnos una lección entera o no finalicemos la lista de tareas durante el tiempo fijado estaremos seguros de haber aprovechado el tiempo invertido en estas actividades, evitando el bloqueo mental.

TRABAJA LA COMPRENSIÓN

Quizás te hayas percatado de que para entender correctamente lo que se explica en un párrafo ha sido necesario que lo leas varias veces y de forma detenida. Para mejorar esta comprensión en estos casos nuestro truco es grabar un audio con esta lección y luego escucharlo ya que en ocasiones nuestro cerebro procesa mejor lo escuchado a lo leído.

FUERA DISTRACCIONES

En otros artículos hemos comentado la importancia de una buena concentración. No olvides que para tener un buen rendimiento durante tus horas de estudio es importante estar en un lugar tranquilo, con buena iluminación y alejado de esas tentaciones que rompan tu concentración como puede ser WhatsApp o Instagram.

Con esta metodología pretendemos no crear ansiedad o estrés y evitar las situaciones de bloqueo mental.

TÉCNICA DE ESTUDIO ADECUADA

Cada persona es un mundo y por lo tanto las necesidades para conseguir un estudio eficiente pueden variar en función de la persona. Puedes encontrar información sobre este tema en el blog de Universitarios en Apuros donde te explicamos cómo realizar un TFG, TFM o cualquier trabajo de forma ordenada y cómo tener unos apuntes fáciles de estudiar.

Uno de los pasos más importantes para organizarnos adecuadamente y no sufrir un bloqueo mental es hacer una selección de información adecuada seguida de métodos como la realización de un mapa mental, realizar resúmenes, la autoevaluación o realizar un pequeño repaso de la última lección estudiada antes de comenzar con una nueva.

REFUERZO POSITIVO

También conocido como sistema de incentivos, este sistema nos permite sentirnos bien cuando alcanzamos uno de los objetivos marcados y premiarnos con una recompensa. Este método favorece nuestra disposición a cumplir nuestras metas y nos incentiva a seguir progresando. Recuerda que siempre deben ser metas realistas y fáciles de cumplir.

Las recompensas pueden ser desde tomarnos un café, comernos una chuchería o salir a dar un paseo.  Por supuesto, en caso de no cumplir el objetivo fijado no tenemos que imponernos una penalización.

Hoy en día es una práctica muy utilizada en el ámbito laboral para premiar a los trabajadores e incentivarlos a superarse poco a poco. Una vez más, esperamos que este artículo te haya sido útil.

4.6/5 - (51 votos)